Golden Record – Unfuture
Instalación – 2022
En colaboración con Roc Parés
Del texto de sala de la exposición Biennal 2064 (2022–2023, Bòlit –Girona–, La Virreina –Barcelona– y Centre del Carme –València):
El 14 de marzo de 2020, la NASA anunció el registro del cambio de rumbo de la sonda Voyager II, sin poder determinar su causa ni recuperar su control. La sonda emprendía el regreso a la Tierra después de cumplir 43 años de viaje, y no se podía hacer nada.
Lanzada al espacio en 1977, la sonda tenía la misión de explorar el Sistema Solar y más allá, enviando un disco (el Golden Record) que recogía 115 imágenes y sonidos con el fin de describir la humanidad a posibles intelectuales extraterrestres.
En 2040 la sonda es recogida en el espacio y se acelera su retorno. En 2046 es depositada en la base de Houston. Pero la ilusión duró poco. La NASA hizo público que se trataba de un hackeo practicado en el 2020 desde la Tierra. Alguien había intervenido la señal telemétrica y las órdenes de navegación. Pero, además, habían insertado una pequeña red neuronal en el ordenador de la sonda que le ayudó a mirar por sí misma las fotos del Golden Record durante los largos años del viaje de vuelta.
La acción fue atribuida a un colectivo artístico autodenominado “unfuture” después de la difusión de un vídeo grabado en 2020, en el que se reivindican las prácticas políticas “en diferido” para desactivar las predicciones. Los hechos de la Voyager representaron un golpe singular en los debates de los años 50 sobre las “batallas del tiempo” en el nuevo capitalismo oracular dominado por las urgencias.
(…)
El colectivo Estampa presenta estas imágenes comentadas mediante un dispositivo de navegación desarrollado por el artista Roc Parés y concebido para entender de cerca el juego anacrónico propuesto por las acciones de unfuture. Se trata de una réplica de la red neuronal que el grupo activista introdujo en la sonda para motivar una reflexión sobre cuáles de esos conceptos contemporáneos estaba ya en las imágenes originales.